Seamos francos, la neta tiene buenas rolas y hay cositas que valen la pena.
Underoath regresó con nuevo álbum este año, mucho pasó durante su ausencia, bandas y grandiosos lanzamientos han ido y venido, pero el poder escuchar una nueva creación de Underoath no podía pasar sin pena ni gloria. Muchos teníamos altísimas expectativas para con este álbum, no sólo porque pertenece a una de las bandas más grandes en cuanto al Metalcore / Post-Hardcore de la década pasada, si no porque Aaron Guillespie (batería y voz) regresó al ruedo con sus compañeros para componer este nuevo trabajo, a 8 años desde su último trabajo discográfico.
El primer adelanto, "On My Teeth", fue un regreso triunfal y salvaje, el hype se puso a tope, recibimos como recompensa a 8 años de espera, un tema directo y bien compuesto, sólido en todos los sentidos y con un estilo hidratado y refrescante, a juzgar por este primer single, se presumía que muy pocas cosas podrían salir mal, pero como lo dicta la ley Murphy, si algo puede salir mal, saldrá mal, y en el caso de "Erase Me" hubo más de un par de cosas que si no estuvieron mal, definitivamente estuvieron de más. "Rapture" representó algo complejo, porque muchos la tacharon de genérica, pero con todo y su estructura sencilla (y que no aporta nada nuevo), es una canción que se disfruta. "Wake Me" es un temazo, y eso es algo que se puede saber desde sus primeros segundos, se encuentra como un track técnicamente muerto, pero muy profundo en composición, quizás es ésto a lo que debería sonar el nuevo Underoath, pero en alguna realidad alterna, porque a pesar de que es un gran tema, no se acopla muy bien al resto del álbum.
Con "Bloodlust" me pasa algo "raro", porque cuando empiezo a escucharla se me hace bastante decente, juega un poco con el estilo de la banda y hasta me parece que coquetea un poco con el estilo de The Devil Wears Prada, pero cuando termina no me deja satisfecho, y la historia se repite con "Sink With You". Por otro lado, dentro de los temas de corte baladezco, el único que salió bien librado fue "ihateit", gracias a la brutal perspicacia de su tecladista Christopher Dudley, la voz de Spencer deja uno de sus mejores momentos, incluso recordándome que se trata aún del mismo ente que dio vida al "Define The great Line", y el coro que, desde luego, hace un gran papel.
Se nota un dramático toque de Metal Industrial, más en algunos temas que en otros, prueba de ello es "No Frame" el cual propone un sonido fresquísimo, que fácilmente podría caber dentro del nicho que The Plot In You viene liderando con su "Dispose". Definitivamente un par de canciones con esa intensidad atmosférica denotando un amargo sello industrial, pudo haber resultado en algo memorable en temas de aspecto más orgánico, algo así como "In Motion", pero con más éxito.
Se lamenta el hecho de que se haya desperdiciado (si así lo quieren ver) la oportunidad de hacer de su regreso algo titánico, pero la verdad es que "Erase Me" no es un mal trabajo discográfico, el problema con una banda de esta talla es que, debido a su larga carrera, han logrado lanzar álbumes grandiosos y dorados para el género, y es su misma figura la que les ha hecho sombra, por otro lado, el error estuvo en las expectativas que tuvieron el rol más importante en este regreso, pero como debe ser, todo ha sido en pos de la evolución, de encontrar una nueva dirección y de hacer propio un nuevo sonido que los caracterice, aunque muchos estaría(mos) más conformes con un "Define The Great Line" 2.0.
[Envío Gratis con Amazon Prime]