Si la claridad y la oscuridad pudieran representarse en expresiones sonoras no cabe duda que el material, que a continuación desmenuzare, sería la más exacta aproximación a esas condiciones.
Material que llega desde Argentina y lleva por nombre Viera II que es la segunda parte de un material anterior, Viera, hecha por un quinteto de muchachos (Fran, Eli, juan, Tino, Jon) denominado Emya (No confundir con la cantante Enya), ellos matizan su propuesta con tintes ambientales, hardcore, screamo y una pisca de shoegaze, así que encasillar esta propuesta en algo determinado es un tanto complicado.
Material que llega desde Argentina y lleva por nombre Viera II que es la segunda parte de un material anterior, Viera, hecha por un quinteto de muchachos (Fran, Eli, juan, Tino, Jon) denominado Emya (No confundir con la cantante Enya), ellos matizan su propuesta con tintes ambientales, hardcore, screamo y una pisca de shoegaze, así que encasillar esta propuesta en algo determinado es un tanto complicado.
Además de su pluralidad en cuanto a estilos, también se debe mencionar su simpleza, su acento minimalista desde la portada hasta la instrumentación. Una forma de acercarse aún más a esas expresiones básicas, fáciles de digerir y de representar.
Esas formas de contraponer representaciones, como luz y oscuridad, se vuelcan en la mente al escuchar las canciones, que en su mayoría superan los 5 minutos, Acacia, una de las mejores canciones de este Ep, presenta la voz desde el arranque con un mesurado scream mientras la guitarra nos regala algunas notas, transcurriendo la cuarta parte llega un discurso y/o declaración aperturada por la batería que mitiga y prepara el terreno para la rabia vocal que expulsa frases como “Soy muy viejo para poder crecer, ellos dicen / Soy muy joven para no intentar creer, el milagro de la fe” si por breves momentos la rudeza se había apoderado del ambiente, pasada la mitad las melodías se suavizan, aunque el modo de la voz sigue por la misma línea, poco a poco la serenidad va ganando terreno y llega al final con golpes de batería.
El Ultimo Enemigo Que Sera Destruido Sera La Muerte, posee la duración más corta con 3 minutos 10, inicia con mucha tranquilidad y sofisticación gracias a las guitarras y la batería, cuestión que recorrerá toda la canción, esto se torna un poco más retumbante gracias a la incursión vocal que va demostrando que dejando lado las etiquetas lo necesario es rabia (pero no mal direccionada), actitud, ganas de decir las cosas con mucha determinación y creer en lo que declaras a la hora de cantar para tomar el control y darle las matices deseadas a una composición y por supuesto volverla un arma letal, que puede mostrar lo más claro y también el lado más turbio, con Hueles Mi Garganta, van cimentando aún más esa versatilidad que poseen vocal e instrumentación, si se podría separar ambos quizá obtendríamos música de géneros muy distantes, pero no. Gracias a esa unión se puede disfrutar de estas magníficas obras sonoras que poseen furia por un lado y melodías hipnóticas por el otro.

95 / 100
Fb/Emya