Reseña: Arch Enemy "War Eternal"

Este primer semestre del 2014 fue un semestre de sorpresas, y entre las cosas que nunca sospechamos, encontrarnos el cambio de vocalista en Arch Enemy, un cambio interesante de los rugidos bestiales de Angela Gossow a los potentes growls de la canadiense y ex-The Agonist Alissa White-Gluz.

Arch Enemy, la banda fundada por el ex guitarrista de Carcass Michael Amott (uno de los mejores guitaristas melódicos para mi), sacó este año War Eternal, un exquisito material de Melodic Death, con toques sinfónicos gracias a ese instrumental que se aprecia en el fondo de varias canciones, e incluso que resulta protagonista en muchas otras, dando a este album un pequeño plus de refinación y cambio.

Esta obra consta de 13 tracks: "Tempore Nihil Sanat (Prelude in F minor)" es el intro de esta bestia de disco, que con coros apocalípticos y hermoso instrumental le da paso al primer tema de War Eternal que se titula "Never Forgive, Never Forget", canción veloz, en donde Alissa muestra de que es capaz, dejando en claro que con Angela o con ella, la brutalidad se mantiene.

Posteriormente llega la canción homónima del album, tema que conserva lo clásico de Arch Enemy, su virtuosismo y energía. “As the Pages Burn” y “No More Regrets” son dos tracks cargados de la brutalidad del death metal, que se acompañan con solos de guitarra deliciosos y melódicos riffs en sus respectivos coros; “You Will Know My Name” y “Avalanche” mezclan lo clásico del melodic death que siempre a manejado la banda, con lo sinfónico de este nuevo disco, dando lugar a piezas dignas de escuchar una y otra vez, con el único objetivo de deleitar al oído con la belleza de los detalles. 

Pronto aparece el interludio “Graveyard of Dreams”, tema corto, en donde la protagonista es la lira del señor Michael Amott, regalándonos minuto y medio de melodías que llegan al alma de cualquiera. “Stolen Life” y “Down to Nothing” son tracks con riffs contundentes como gancho al hígado, y con coros pegajosos que te dejan tarareando la canción por un largo tiempo. “Time Is Black” por mucho la canción mas deleitable de War Eternal, desde su intro cargado de obscuridad, que como avanza, nos lleva a pesados riffs que se combinan de manera esplendida con el instrumental sinfónico. Para cerrar llega “Not Long for This World”, un instrumental que apaga de manera bella y lentamente este album.

Para concluir: War Eternal es un trabajo cargado de un sonido clásico con agregados instrumentales que le dan un toque único, donde como siempre, Amott nos deleita con el virtuosismo en su guitarra en cada uno de sus solos que se perpetúan en el gusto de cada fan de Arch Enemy. Si lo que buscamos es una combinación ideal entre brutalidad, melodía, solos épicos y detalles musicales exquisitos, la recomendación es War Eternal.

Calificación: 88/100