El nuevo lanzamiento de Into Infernus lleva el nombre de "The End Of Eden" y está programado para el dia 16 de este mismo mes. Afortunadamente, la buena relación que hemos tejido con ellos nos dio la oportunidad de poder escucharlo con días de anticipación, por lo cual reitero un agradecimiento para ellos.
No es ningún secreto y no puedo dejar de decir que desde que lo anunciaron, éste era (para mi) el candidato más fuerte para llevarse el título en mi lista de los mejores álbumes del año. Con un sorprendente debut llamado "VII" lanzado el año pasado (el cual fue lugar 3 en mi top10), junto a su versión orquestal, no me quedaba duda de que volverían más fuertes y mejorados que nunca, estrenando sello discográfico y con la experiencia de ya contar con unos cimientos fortísimos.
Lo noté de nuevo en éste álbum y lo mencionaré desde ahora, estoy ENAMORADO de la conceptualización, la trama y la manera en la que se desenvuelven su par de lanzamientos, un manejo conceptual maravilloso. Primero, "VII", nos ponían en perspectiva los siete pecados capitales según el cristianismo, narrándonos una historia por cada uno de ellos, de forma extraordinaria. Ahora en "The End Of Eden", tomaron como referencia la historia protagonizada por Adán y Eva en el primer libro de la Biblia, la cual es conocida (aunque sea muy vagamente) por la mayoría de nosotros, tocando temas de tentación, infortunio y tragedia.
El primer tema es "Prologue: Domain Of The Beast", donde la letra es una sátira a lo propuesto por dios, cuestionando el por qué ubicó la fruta prohibida junto al hombre en el mismo jardín, sabedor de que tarde o temprano caería en tentación. Un tema de sólo apertura, sinfónico y sin pesadez alguna, para ponernos a temple. "A Death Stalking Addiction" es la real bienvenida, tema que les sirvió como single días atrás, muy rápido, blast beats con un teclado de fondo que conquistan a mis oidos cual Casanova a las mujeres. "Falling From The Heavens" nos muestra más elementos de su black metal, que no siendo tan puro sí llega a ser muy notorio, imprimiéndole su lado 'sabroso', como al final en este tema. Después en "Eve: Arch Angel" (que igual funcionó como single) en un principio se asimila un poco al segundo, pero acá le dan un respiro más digerible para los que no toleran mucho su género, hasta con un breakdown demasiado hermoso. "The Vermin Race" le da más pausas en su ritmo, tema progresivo que demuestra el lado más técnico de la banda, las voces que le meten ese kvlt necesario para ser uno de mis favoritos del álbum. "Albastor: The Serpent" llega para darnos un poco de calma, a menos eso parecía, pero la brutalidad se apodera una vez más del ambiente en mis oidos, tema que combina de manera perfecta lo progresivo con lo sinfónico. Luego "Tainted" es una maldita obra maestra, por donde se le vea, en donde predominando los blast beats y los sonidos orquestales, guturales descomunales y desgarradores gritos propios del black metal, nos hacen imaginar paisajes tétricos sobre el concepto del oscuro Edén, su verdadero propósito. "Adam: The Addict" es la pausa necesaria que esperaba un par de temas atrás, algo tranquilo para no sobrecargar el deleite que hasta el momento han logrado cultivar. "I Am Nothing" es, para mi, la que que tiene la lírica que más me llamó la atención, en ella se narra la muerte de Eva de manera muy creativa, increible. Luego, ya en la recta final, está la primera parte de tres, "Eden I: The Temptation Of Sin", un tema largo de casi 10 minutos con un inicio tentador, por empezar lento. Pero lo grandioso de éste va creciendo en proporción a su duración, donde las guitarras parecen meteóritos cayendo sobre la Tierra, como una reacción química explosiva, dándose tiempo hasta de incluir vocales limpias, algo nuevo para Into Infernus. "Eden II: Demon's Dance" es tan macabra como el puto infierno, una muestra del cataclismo que puede ser representado mediante la música, el cual viene acompañado de una ambientalización instrumental magnificente. Y para concretar está "Eden III: Domain Of The Angel", el tema más largo del álbum, plagado de sinfonías brillosas y, como en el tema número 9, una letra por demás grandiosa y abundante en significado. Breakdowns, tiempos a media velocidad y una estructura no muy constante en su sonido, pero si en lo placentero.
"The End Of Eden" logró llenarme en todos los sentidos. Conceptualmente es maravilloso y musicalmente inmejorable, cumpliendo ampliamente con mis expectativas para ponerlos en mi podio anual. Desde ahora puedo mencionar a Into Infernus como una de mis bandas favoritas de los últimos años.
No es ningún secreto y no puedo dejar de decir que desde que lo anunciaron, éste era (para mi) el candidato más fuerte para llevarse el título en mi lista de los mejores álbumes del año. Con un sorprendente debut llamado "VII" lanzado el año pasado (el cual fue lugar 3 en mi top10), junto a su versión orquestal, no me quedaba duda de que volverían más fuertes y mejorados que nunca, estrenando sello discográfico y con la experiencia de ya contar con unos cimientos fortísimos.
Lo noté de nuevo en éste álbum y lo mencionaré desde ahora, estoy ENAMORADO de la conceptualización, la trama y la manera en la que se desenvuelven su par de lanzamientos, un manejo conceptual maravilloso. Primero, "VII", nos ponían en perspectiva los siete pecados capitales según el cristianismo, narrándonos una historia por cada uno de ellos, de forma extraordinaria. Ahora en "The End Of Eden", tomaron como referencia la historia protagonizada por Adán y Eva en el primer libro de la Biblia, la cual es conocida (aunque sea muy vagamente) por la mayoría de nosotros, tocando temas de tentación, infortunio y tragedia.
El primer tema es "Prologue: Domain Of The Beast", donde la letra es una sátira a lo propuesto por dios, cuestionando el por qué ubicó la fruta prohibida junto al hombre en el mismo jardín, sabedor de que tarde o temprano caería en tentación. Un tema de sólo apertura, sinfónico y sin pesadez alguna, para ponernos a temple. "A Death Stalking Addiction" es la real bienvenida, tema que les sirvió como single días atrás, muy rápido, blast beats con un teclado de fondo que conquistan a mis oidos cual Casanova a las mujeres. "Falling From The Heavens" nos muestra más elementos de su black metal, que no siendo tan puro sí llega a ser muy notorio, imprimiéndole su lado 'sabroso', como al final en este tema. Después en "Eve: Arch Angel" (que igual funcionó como single) en un principio se asimila un poco al segundo, pero acá le dan un respiro más digerible para los que no toleran mucho su género, hasta con un breakdown demasiado hermoso. "The Vermin Race" le da más pausas en su ritmo, tema progresivo que demuestra el lado más técnico de la banda, las voces que le meten ese kvlt necesario para ser uno de mis favoritos del álbum. "Albastor: The Serpent" llega para darnos un poco de calma, a menos eso parecía, pero la brutalidad se apodera una vez más del ambiente en mis oidos, tema que combina de manera perfecta lo progresivo con lo sinfónico. Luego "Tainted" es una maldita obra maestra, por donde se le vea, en donde predominando los blast beats y los sonidos orquestales, guturales descomunales y desgarradores gritos propios del black metal, nos hacen imaginar paisajes tétricos sobre el concepto del oscuro Edén, su verdadero propósito. "Adam: The Addict" es la pausa necesaria que esperaba un par de temas atrás, algo tranquilo para no sobrecargar el deleite que hasta el momento han logrado cultivar. "I Am Nothing" es, para mi, la que que tiene la lírica que más me llamó la atención, en ella se narra la muerte de Eva de manera muy creativa, increible. Luego, ya en la recta final, está la primera parte de tres, "Eden I: The Temptation Of Sin", un tema largo de casi 10 minutos con un inicio tentador, por empezar lento. Pero lo grandioso de éste va creciendo en proporción a su duración, donde las guitarras parecen meteóritos cayendo sobre la Tierra, como una reacción química explosiva, dándose tiempo hasta de incluir vocales limpias, algo nuevo para Into Infernus. "Eden II: Demon's Dance" es tan macabra como el puto infierno, una muestra del cataclismo que puede ser representado mediante la música, el cual viene acompañado de una ambientalización instrumental magnificente. Y para concretar está "Eden III: Domain Of The Angel", el tema más largo del álbum, plagado de sinfonías brillosas y, como en el tema número 9, una letra por demás grandiosa y abundante en significado. Breakdowns, tiempos a media velocidad y una estructura no muy constante en su sonido, pero si en lo placentero.
"The End Of Eden" logró llenarme en todos los sentidos. Conceptualmente es maravilloso y musicalmente inmejorable, cumpliendo ampliamente con mis expectativas para ponerlos en mi podio anual. Desde ahora puedo mencionar a Into Infernus como una de mis bandas favoritas de los últimos años.
Puntuación:
98 / 100
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